El portal Diario Opinión de La Costa difundió un artículo en el que informa que la organización Innocence Project Argentina solicitó la revisión de la condena a Adrián Darío Svich, quien cumple prisión perpetua por el crimen de Mara Sofía Mateu, ocurrido en Santa Teresita en 2008.
El femicidio de Mara, de 16 años, conmocionó a la comunidad. El 23 de marzo de ese año salió sola de su casa para ir a un ciber y su cuerpo fue hallado al día siguiente por un turista entre los médanos, a la altura de la calle 36. La joven presentaba signos de abuso, golpes y estrangulamiento.
Según el informe publicado por el medio, Svich, un turista platense, fue detenido por una contravención en un hotel de la zona y liberado por falta de mérito. Meses más tarde, un nuevo análisis de ADN lo vinculó nuevamente a la investigación. En 2011, fue condenado junto a Diego Daniel Buzzo por “abuso sexual con acceso carnal agravado por la cantidad de intervinientes y homicidio criminis causa”. A Buzzo también se le atribuyó el robo del celular y el reproductor MP3 de la víctima.
La condena fue ratificada por la Cámara de Casación Penal y la Suprema Corte bonaerense, y quedó firme en 2018.
La presentación judicial y las nuevas pruebas
De acuerdo al artículo de Diario Opinión, quince años después del crimen, Innocence Project Argentina presentó ante Casación una acción de revisión. La defensa de Svich sostiene que un nuevo análisis de ADN realizado por la Fundación Favaloro descarta la presencia de material genético de la víctima en la prenda clave del caso, lo que pondría en duda la validez del informe original.
“El único elemento que vincula a Svich con los hechos es ese informe de ADN. No hay rastros suyos en la escena del crimen, en el cuerpo de la víctima ni pruebas de que conociera a Buzzo o a Mara”, declaró el abogado Manuel Garrido, presidente de la organización.
La defensa también presentó un informe criminalístico de 2022 que examinó peritajes, prendas y la autopsia. El estudio concluye que no existen evidencias físicas o biológicas que ubiquen a Svich en el lugar del hecho.
Se sumaron además cuestionamientos a una frase pronunciada por el acusado durante una discusión con personal del hotel, en estado de ebriedad: “Tengo una chica colgada de un árbol”. Según su defensa, se trató de una expresión incoherente en medio de un altercado y no puede tomarse como una confesión.
Svich declaró que las lesiones observadas en su cuerpo —interpretadas como arañazos— eran producto de reparaciones en su casa antes del viaje. La presentación incluye también el pedido de libertad provisional, la citación del perito responsable del nuevo análisis y el testimonio de un psicólogo que lo atendió durante su detención.
“La condena al verdadero culpable está firme: el ADN de Buzzo fue hallado en el cuerpo de la víctima y en el cordón con que la ahorcaron. También fue visto con ella momentos antes del crimen y tenía sus pertenencias. Nada de eso ocurrió con Svich”, finalizó Garrido.
La publicación de Diario Opinión de La Costa vuelve a traer a la agenda judicial uno de los casos más recordados en la historia reciente de Santa Teresita.
