Hoy nos toca despedir a Mariano Bobryk, quien falleció a los 72 años en el hospital de Mar de Ajó, tras una enfermedad que lo fue consumiendo con el tiempo. Su partida deja un vacío enorme en la comunicación local y en quienes tuvimos el privilegio de compartir parte del camino con él. Creador del Grupo Opinión, llevó adelante la conducción de distintos emprendimientos pasando por distintos soportes informativos, de la gráfica a lo digital.
Conocí a Mariano a mediados de los años 90. Un polaco entusiasta, soñador, terco como pocos y, sobre todo, leal a sus amigos. Como todo hombre de la comunicación de su tiempo, supo conducir un multimedio en un entorno siempre cambiante, con la necesidad constante de adaptarse y de sortear los vaivenes económicos de un país que nunca da tregua. Su medio lleva la frase «Democracia Informativa» lo que define claramente su compromiso con sus ideales.
Hoy me resulta difícil escribir estas palabras. Son muchos años de encuentros, desafíos y discusiones que, aunque acaloradas, siempre terminaban con respeto y una mirada cómplice. Saber que ya no podré escuchar su voz ronca de fumador duele profundamente.
En la historia que construimos a diario en la comunicación local, su ausencia es una pérdida irreparable. Mariano fue un luchador incansable, de los que no temían decir lo que pensaban ni enfrentar los desafíos con tenacidad. Discutidor como pocos, testarudo como los esenciales, deja un legado que, sin duda, nos corresponde continuar.
Hasta siempre, Mariano.
