Pese al clima adverso de la mañana de hoy, Walter se animo a caminar por la Av. Chiozza y en su paseo se encontró con un personaje que de agua no quiere saber nada.
Si bien a la primera impresión nuestro compañero se asusto por como el agua ganaba lugar en las veredas, luego comprendió que eso es característico cuando cae tanta agua de golpe y luego empieza a bajar hacia la playa.
Siguiendo en su recorrido, Walter, se encontró a La Angie, quien por nada del mundo iba a ponerse a trabajar un día como hoy, con esta lluvia. No sea cosa que el agua toque su piel y la limpie.